Por revanchismo político-electoral, Maleno Rosales buscan incendiar Medellín

Manipulando a personas ajenas al municipio y muchos con antecedentes crimínales, el diputado local se ha convertido en el principal promotor de violencia en municipio.

Recientemente violentaron al diputado local Fernando Arteaga y a funcionarios de Medellín.

¿Qué sucede con el plantón de ex trabajadores de SAS? ¿Si Medellín deja Grupo MAS que pasará con los manifestantes?

Medellín de Bravo, Ver. / Columna: DeshuesaderoPolítico / 30 de julio de 2023.

El pasado viernes, la exigencia de que Medellín se saliera de Grupo MAS, como lo pedían los ex trabajadores de SAS, se aprobó en sesión de cabildo en el ayuntamiento de Medellín, pero aún así, un grupo alentado por el diputado Maleno reaccionaron de manera hostil desde que se filtro la noticia la mañana del jueves, y trataron de que la sesión no se realizara.

La situación de los ex obreros de SAS es un tema complejo, pero a grandes razgos son dos lineas, por una parte una lucha laboral por la reinstalación o una liquidación justa; y por otra parte el tema de la concesión del agua que se entregó a Grupo MAS (en Veracruz y Medellín de Bravo) y CAB (en Boca del Río).

La primer linea compete exclusivamente a las autoridades laborales (por ello no lo abordaremos en este texto). La segunda linea es donde inicían los problemas e incluso incongruencias en los discursos políticos.

Desde que el diputado local Magdaleno (Maleno o Leno) Rosales se involucro, el asunto giró de una lucha legítima a golpeteo político por la candidatura en el siguiente proceso electora. Por ello es que las últimas marchas que han realizado, desde que dicho personaje se involucro, ha disminuido el apoyo social de los medellinenses, y lo han tratado de compenzar con una docenas de camiones de gente de otros municipios que acarrea el diputado -aquí es donde se estarían infiltrado personas ajenas al movimiento y con antecedentes criminales-, mismas que están incurriendo en actos de violencia, ensuciando una lucha social legítima por complacer intereses políticos de un diputado que dejará el cargo en algunos meses.

Por ello preocupan los últimos hechos registrados el viernes pasado, en donde un grupo enardecido violentó al diputado local Fernando Arteaga Aponte, así como a funcionarios y policías municipales -tras participar en la sesión de Cabildo que dio fin a la sociedad del ayuntamiento con Grupo MAS-, confirman que el intéres de los ex trabajadores está pasando a segundo termino, dejando de ser un movimiento pacífico, como lo ha dirigido la líder Angélica Navarrete.

Es evidente que el objetivo de Maleno era que no se realizara dicha sesión porque sino se queda sin razón de ser el plantón, ya que se cumpliría lo que ellos mismos habían solicitado en el plantón que se encuentra frente al palacio medellinense, al que fueron acarreados personas de otros municipios, algunos de ellos identificados con antecedentes penales.

Por revanchismo político-preelectora, Maleno buscaría desestabilizar la paz social del municipio, sin pensar en las graves afectaciones que está causando al grupo de extrabajadores y a los medellinenses que se han sumado a que Medellín se retire de Grupo MAS.

Fue el propio diputado Arteaga, presidente de la comisión del Agua del Congreso del Estado, quien promovió y coadyuvó para concretar la salida de Medellín de la sociedad con Grupo MAS elaborando una ruta de procedimientos para que el municipio evitará la multa millonaria por penalización de clausula de contrato. Sin embargo los seguidores de Maleno acusaron de traidor, pese a que con esto se cumpliría lo que desde siempre habían demandado los ex trabajadores del SAS.

Basta recordar que SAS se extingue en el 2016 por su incosteabilidad para operar debido a que el 80% de los ingresos se destinaban a pagar la abultada nómina sindical y de confianza, en esta última se señalaba que había “aviadores” con grandes sueldos, además de que los recursos eran manejados con irregularidades y opacidad.

Se sabe que desde el 2016, tras la entrada en operaciones de Grupo MAS, los liquidadores pusieron a disposición de las autoridades laborales la liquidación de los ex trabajadores -1100 sindicalizados y 400 de confianza- en cheques nominativos que sólo una tercera parte aceptó recibir en la Junta de Conciliación y Arbitraje, por reclamar que el monto no era justo.

A la fecha, los recursos para la liquidación de los ex trabajadores están a disposición de las autoridades laborales en Grupo MAS para continuar con las indemnizaciones.

Sin embargo, las reclamaciones actuales no son por la falta de liquidación de los ex obreros, sino que hay se insiste en reclamar una reinstalación en una empresa que ya no existe.

Y en este tenor, el diputado Maleno, a pesar de llevar 5 años como diputado, no ha impulsado ningún procedimiento en el congreso para que se le retire la conseción a Grupo MAS y se restablesca SAS. Posiblemente es porque sabe que esa opción no es viable pero juega con la esperanza de los extrabajadores que llevan más de un lustro de lucha.

¿Qué sucederá con los ex trabajadores?

No hay respuesta acertada. Teniendo en cuenta que llevan cuatro periodos de lesgiladores (diputados) que solo “les dicen que sí pero no les dicen cuándo” entre ellos dos periodos de Maleno, ya con la separación de Medellín de Grupo MAS, faltaría ver si el ayto de Veracruz también se sale, caso contrarío, la lucha laboral podría continuar varios años más, pero a Maleno no le intéresa molestar a la alcaldesa panista, principalmente porque se acusó al diputado de recibir millones de pesos de los Yunes para impedir que el congreso cambiara al Fiscal azul. Además, hay que recordar que familiar directo de Maleno trabajó en el ayto de Veracruz en la administración de Fernando Yunes, hermano del esposo de la hoy alcaldesa

Por cierto, a CAB, de administración panista en Boca del Río (que antes también perteneció a SAS), no se le toca.

La petición de los ex trabajadores de que Medellín se salga de esa empresa es justo para que se disuelva, pero al continuar el municipio de Veracruz, Grupo MAS continuará operando. Por lo que tendrán que seguir el proceso con las autoridades laborales.

En Medellín, una vez que se complete el proceso de separación, el ayuntamiento podrá crear propio sistema de agua, y con ello contratar a personal capacitado en dicha labor, la pregunta aquí sería si los ex trabajadores de SAS que participan en acciones violentas, alentados por el diputado, serán contratados por el ayuntamiento; la respuesta parece más que obvia.

Como siempre, el ajedrez político se mueve a intéres de los de arriba y los peones quedan a merced…